El ímpetu por impulsar la sostenibilidad de Islandia nació al tomar conciencia de que la nación islandesa dependía en exceso de fuentes de petróleo extranjeras. En la actualidad, el 80 por ciento de la energía de Islandia proviene de recursos no fósiles, con la energía hidráulica y la energía geotérmica a la cabeza.
«Ser capaces de poder ofrecer nuestra propia energía es muy importante para nuestra independencia», afirma Jón Björn Skúlason, jefe de Icelandic New Energy, empresa que coordina iniciativas nacionales entre el gobierno, el sector y organismos de investigación.
Aunque los combustibles fósiles siguen suponiendo el 20 por ciento del consumo general de energía, el gobierno islandés ha implementado un programa de incentivos financiado por el estado para fomentar el uso de vehículos eléctricos. Ya está dando sus frutos: en la actualidad, hay más de 6.000 automóviles eléctricos, en comparación con los escasos 90 que había en 2014.
Para alimentar estos automóviles eléctricos, se han instalado más de 20 estaciones de carga rápida de ABB a lo largo de la afamada Route 1 de Islandia, carretera de más de 1300 kilómetros que es la autovía principal del país y su eje logístico.
Ahí, los cargadores están expuestos a las condiciones climáticas más extremas, con temperaturas que descienden hasta los -30 °C. «Es imposible encontrar un clima más desafiante que el de Islandia», afirma Bjarni Már Júlíusson, director general de ON Power, compañía eléctrica líder que forma parte de Reykjavik Energy. ON Power operará la red de cargadores de ABB situada a lo largo de la Route 1.
«Los cargadores están expuestos a condiciones climáticas increíblemente duras, con mucha sal, niebla, temperaturas bajas, humedad y tormentas».
Los cargadores rápidos de ABB pueden cargar por completo la batería de un automóvil eléctrico en tan solo 15-30 minutos. Todos los cargadores de ABB admiten soluciones completas para autorización de usuarios, pago y conectividad de red. Una infraestructura estable para la carga de vehículos eléctricos es vital para que Islandia pueda hacer realidad su deseo de ser totalmente sostenible en materia de energía. «Al principio la gente era escéptica, pero ahora ven los vehículos eléctricos en la carretera y se dan cuenta de que han venido para quedarse», afirma Skúlason.
La tecnología ABB AbilityTM garantiza que las cargas estén operativas 24/7. La conectividad digital remota permite la monitorización continua del dispositivo desde cualquier lugar de la isla.
Permite a ON Power acceder a datos en tiempo real para la monitorización remota y el control proactivo del estado técnico y de funcionamiento de las estaciones de carga. ABB aporta una visión global totalmente flexible de toda la red de carga para garantizar que el sistema sea plenamente funcional incluso a temperaturas de tan solo -35 °C.
La tecnología basada en la nube conecta los cargadores a la plataforma de Microsoft Azure en la nube para impulsar el crecimiento del valor y la eficiencia. Con ello, los técnicos pueden diagnosticar más del 90 por ciento de todos los errores y resolver más del 60 por ciento de forma remota, sin tener que desplazarse a la ubicación; al mismo tiempo, hace posible que ON Power pueda guiar a sus clientes de la mejor forma posible.
«Normalmente, ABB puede rearrancar un cargador de forma remota en caso de error, lo cual es extremadamente práctico en Islandia, debido a las largas distancias y las malas condiciones eteorológicas que siempre hay que tener en cuenta a la hora de enviar al personal de servicio», afirma Óskar Gústavsson, responsable de Ventas de Johan Rönning, distribuidor de ABB en Islandia.
ON Power ha aprovechado el color que distingue a la empresa para ayudar a los motoristas a ubicar los cargadores. «Todos los cargadores son de color naranja, lo cual hace que sean más fáciles de ver cuando el mal tiempo reduce la visibilidad», afirma Lasse Altmann, responsable de Desarrollo de negocio de ABB E-Mobility Charging.